New York Cheesecake

PARA LA BASE:

- un paquete de galletas
- 85 gr de mantequilla a temp. ambiente


PARA LA TARTA:

- 900 gr de Philadelphia
- un yogur y medio tipo griego
- 250 gr de azúcar
- 3 huevos
- el zumo de medio limón
- 3 cucharadas soperas de harina tamizada (50 gr)
- una pizca de azúcar avainillado

PARA LA SALSA DE FRESA:

- 300 gr de fresas
- el zumo de medio limón
- 3 cucharadas soperas de azúcar
- 1 cucharadita de kuzu de la marca Mimasa diluido en agua (el kuzu es el almidón de una planta llamada "pueraria", y se usa en la medicina tradicional china para casos como parar gastroenteritis, contra las alergias, la resaca, bronquitis, alcoholismo... y en la cocina se usa como espesante natural)

1. Precalentamos el horno a 200º.

2. Trituramos las galletas hasta conseguir un polvo fino.

3. Mezclamos las galletas trituradas con la mantequilla.

4. Untamos la base de un molde desmontable con un poco de mantequilla y cubrimos la base del molde con la mezcla de galletas y mantequilla. Hacemos una base fina, vamos distribuyendo la masa por el molde y aplanando con las manos y la ayuda de una cuchara. Lo metemos en el congelador mientras preparamos el relleno. 

5. Batimos el queso crema con las varillas, solo un poco. Añadimos el azúcar, el yogur, la vainilla, el limón y la harina y batimos un poco más. Añadimos los huevos uno a uno, sin batir mucho, para que no coja demasiado aire la masa. 

6. Ponemos el relleno de queso sobre la base de galletas. 

7. Horneamos durante 10min a 200º. Después, bajamos a 90º y horneamos 30min más. 

8. Una vez pasado este tiempo, dejamos que la tarta se vaya enfriando dentro del horno SIN ABRIR LA PUERTA para que no se hunda, durante varias horas. Una vez la tarta esté a temperatura ambiente, la sacamos del horno y la metemos al frigorífico. 

LA SALSA:

1. Lavamos las fresas y las cortamos a trocitos. Las calentamos en un cazo con el zumo de limón y el azúcar. Removemos constantemente, mientras las vamos aplastando, y una vez estén bastante deshechas, acabamos de triturarlas con el robot de cocina. Colamos la salsa para evitar pepitas.

2. Diluimos una cucharadita de kuzu en un vaso de agua fría y lo hervimos unos cinco minutos, vamos removiendo hasta que adquiera una consistencia gelatinosa y casi transparente. 

3. Añadimos la salsa de fresas al kuzu y removemos hasta que quede una mezcla gelatinosa. 

4. Distribuimos la salsa sobre la tarta con la ayuda de una espátula, y guardamos la cheesecake en el frigorífico hasta que vayamos a comerla.